carga por la autopista de España por eso lo tratan con respeto,sobre todo en
invierno, cuando el camino se curva y serpentea por la montaña, y al costado de
la carretera congelada caen a plomo empinados barrancos. Allí se han perdido
incontables camiones con sus choferes.Es probable que muchos más sigan sus
huellas.En un viaje por la autopista, me encontré con la Real Policía Montada
de España y varias unidades de salvamento, que remolcaban los restos de un
camión desde el fondo de un profundo barranco.Después de aparcar
mi equipo, me acerqué al grupo de camioneros que observaban en silencio las
consecuencias del accidente.Uno de los policías montados se acercó a nosotros para decirnos, en voz baja, lo siento el conductor estaba muerto
cuando lo encontramos .Debe haber caído por la cuesta hace dos días ,cuando
hubo una gran tormenta.No había muchas huellas.De pura casualidad detectamos el reflejo del sol en un fragmento de cromo.
Sacudía la cabeza ,mientras revisaba el bolsillo de su abrigo.Tomen esto,creo
que deberían leerlo. Supongo que vivió un par de horas antes de que el frío
acabara con él.Nunca había visto lágrimas en los ojos de un policía ,siempre
pensé que ,después de presenciar tanta muerte y desesperación, estaban
inmunizados .Pero aquél se secó las lágrimas al entregarme la carta. Al leerla me eché a llorar.Cada uno de los camioneros leyó también en silencio aquellas
palabras antes de volver lentamente a su vehículo. Esa carta me quedó grabada
en la memoria a tal punto que pasados los años ,sigue tan vívida como si aún la
tuviera en mis manos.Quiero compartirla contigo y con tu familia
......Continuará.........
Diciembre de 1974
Amor mío .Ésta es una de esas cartas que ningún hombre quisiera escribir,
pero tengo la suerte de tener algo de tiempo para expresar lo que tantas veces
he olvidado decir. Te quiero, corazón.
Solías decir, en broma , que yo quería más al camión que a ti, porque pasaba
más tiempo con él. Quiero a este pedazo de hierro, si, se ha portado bien
conmigo. Me acompañó en momentos y en lugares difíciles. Siempre podía
contar con él para los viajes largos y era veloz en las carreteras .Nunca me
abandonó.Pero ¿sabes una cosa?.A ti te amo por las mismas razones. Tambien
me acompañaste en los tiempos y en los lugares difíciles.Te acuerdas de mi
primer camión, ese viejo cascajo que nos arruinaba, pero con el que siempre
ganaba lo suficiente para poner la olla?.Tú saliste a trabajar ,para que
pudiéramos pagar el alquiler y las cuentas.Cada centavo que yo ganaba
se lo llevaba ese camión,tu sueldo cubría la comida y el techo.
Yo me quejaba del camión, en cambio ,no recuerdo que tú lo hayas hecho
alguna vez, cuando volvías cansada del trabajo y yo te pedía dinero para
volver al camino. Si te quejaste ,no te escuché, estaba demasiado sumido
en mis problemas para pensar en los tuyos.Ahora pienso en todas las cosas
a las que renunciaste por mí.La ropa ,las vacaciones ,las fiestas ,las amigas.
Nunca te quejaste.Y yo ,por algún motivo ,nunca te di las gracias por ser
como eres.Cuando tomaba café con los muchachos hablaba de mi camión,
del equipo, de las cuotas. Me olvidé de que eras mi socia,aun cuando no
estuvieras a mi lado en la cabina.Fue gracias a tu sacrificio y tu decisión, no
sólo por los míos ,que finalmente llegó el camión nuevo. Yo estallaba de orgullo
por ese camión.También estaba orgulloso de ti, pero nunca te lo dije.Daba por
sentado que lo sabía, pero si te hubiera dedicado tanto tiempo como a lustrar
los cromados tal vez te lo hubiera dicho.En todos estos años de gastar el
pavimento ,siempre supe que me acompañabas con tus oraciones .Pero esta vez
no alcanzaron.
Estoy herido y es grave .He recorrido mi último kilómetro.Por eso quiero decir
las cosas que debieron decirse muchas veces.Las que quedaron olvidadas
porque estaba muy ocupado con el camión y el trabajo.
Pienso en los aniversarios y cumpleaños sin mi presencia.En los actos escolares
a los que fuiste sola porque yo estaba en la carretera .Pienso en las noches que
pasaste sola ,preguntándote dónde estaría yo,cómo irían las cosas.Pienso en
todas las veces en que se me ocurrió llamarte ,sólo para decirte hola, y luego no
lo hice.Pienso en la tranquilidad de saber que me esperabas en casa ,con los
niños.Y tantas cenas familiares en que debiste justificar mi ausencia,que estaba
ocupado cambiando el aceite, buscando repuestos o durmiendo para salir
temprano al día siguiente.Siempre había algún motivo, pero ahora ,no sé por
qué ya no me parecen tan importantes.Cuando nos casamos no sabías cambiar
una bombilla.En un par de años ya eras capaz de reparar la caldera en medio
de una ventisca si yo estaba en la otra punta del país esperando una carga. Por
ayudarme llegaste a ser buena en mecánica.Me llenaste de orgullo el día que trepaste
a la cabina y diste marcha atrás sobre los rosales.
También me sentía orgulloso cuando, al detenerme frente a casa, te encontraba dormida
en el coche , esperándome. Ya fueran las dos de la mañana o las dos de la tarde,
siempre te acicalabas como una estrella de cine para recibirme.Eres hermosa,¿sabes?
Creo que llevo mucho tiempo sin decírtelo,pero es cierto.
En mi vida he cometido muchos errores, pero sí alguna vez tomé una buena decisión ,fue
pedirte que te casaras conmigo.Nunca pudiste entender qué me mantenía montado en ese
camión .Yo tampoco lo sabía, pero era mí manera de ganarme la vida y tú me apoyabas.
En las buenas y en las malas, siempre estabas allí .Te quiero ,mi vida,y quiero a los niños.
Me duele el cuerpo, pero más me duele el corazón.Cuando termine este viaje no estarás allí.
Por primera vez desde que estamos juntos me encuentro solo y asustado. Te necesito mucho,
pero sé que ya es tarde. Es curioso, pero ahora sólo tengo este camión .
Este maldito camión que gobernó nuestra vida durante tanto tiempo. Este montón de hierros
retorcidos en el que pasé tantos años. Pero él no puede retribuirme el cariño.
Sólo tú puedes hacerlo. Estás a miles de kilómetros de aquí, pero te siento conmigo .
Veo tu cara, siento tu amor. Y tengo miedo de hacer solo el tramo final.
Diles a los niños que los quiero mucho. No dejes que los muchachos se ganen la vida al
volante de un camión. Creo que eso es todo, corazón. ¡Cómo te quiero, Dios mío!
Cuídate mucho y recuerda siempre que te amé más que a nada en la vida.
Sólo que olvidé decírtelo.
E F M.Sólo que olvidé decírtelo.
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